sábado, 2 de enero de 2016

TEMA EN PORTADA
Una familia con VALORES

Por Karina Bonilla de Carbajal
Conferencista con Master en Asesoramiento Educativo Familiar

“Si hay rectitud en el corazón, habrá belleza en el carácter. Si hay belleza en el carácter, habrá armonía en el hogar. Si hay armonía en el hogar, habrá orden en la Nación. Si hay orden en la Nación, habrá paz en el mundo.” Proverbio chino.




A pesar del inmenso desarrollo que la humanidad experimenta y de los grandes avances tecnológicos, existe una preocupación creciente por nuestro fracaso en el objetivo más importante de todos: la formación de familias más fuertes. ¿Qué hace la diferencia entre una familia fuerte y una débil? No es el dinero, ni el nivel educativo o social de sus miembros, ni su tamaño o su nacionalidad o los problemas que enfrenta. La diferencia radica en los valores que se viven en ella. Una familia con Valores, no es una familia perfecta y sin problemas, tiene imperfecciones, incongruencias, retos y presiones, como todas las demás, pero que los enfrenta con una perspectiva diferente.

La Real Academia Española define valor como: “Fuerza, actividad, eficacia o virtud de las cosas (o personas) para producir sus efectos.” Los valores son  actitudes o cualidades que una persona tiene para vivir, mejorar en su dignidad y compartir en sociedad. Nos permiten guiar nuestras decisiones, para producir bienestar en nuestro entorno y paz en nuestro corazón.

Los valores son desarrollados y perfeccionados por una persona a lo largo de su vida, pero su origen natural es en el seno de nuestras familias. Se aprenden en la medida en que se viven, por ello la única manera de enseñar valores es a través del ejemplo, de nuestro modelaje. Todos en la familia educan: en primer lugar los padres, pero también los abuelos, los tíos, los primos y hermanos.

En la familia los valores construyen ideales, pero también normas, que como familia estamos dispuestos a esforzarnos por vivir. Tenerlos bien definidos ayuda a fortalecer las bases para una familia unida y nos da sentido de pertenencia y orgullo. Hay muchos valores importantes de vivir, por lo que cada grupo familiar puede enfocarse en los más relevantes para ellos.

A continuación algunos valores familiares que vale la pena considerar:
·       BONDAD: Mostrar consideración e interés personal por otros.
·       FE: Confianza en lo que no se ve.
·       GRATITUD: Sentimiento de aprecio y reconocimiento de los beneficios obtenidos.
·       HONESTIDAD: Ausencia de mentira, engaño o robo.
·       HUMILDAD: Cualidad de ser modesto.
·       JUSTICIA: Buscar lo que es equitativo.
·       LEALTAD: Proceder con fidelidad respecto a mi palabra, a personas o a instituciones.
·       RESPONSABILIDAD:  Completar satisfactoriamente las tareas asignadas.
·       RESPETO: Mostrar aprecio por el valor de algo o de alguién.
·       TOLERANCIA: Respetar ideas de otros, aunque no coincidan con las propias, entre otros.
Extraído del libro Alcanzando el Verdadero Éxito. Character Training Institute

Seguramente recuerda a alguna persona que haya dejado una importante huella en su vida: alguien que le enseñó algo, que lo apoyó, que le dio un gran ejemplo o que simplemente lo hizo más feliz. Identifique los valores que vivía esa persona ¿Cuáles eran? ¿Qué valora usted? ¿Qué valores le gustaría que se vivieran en su familia? ¿Qué valores quisiera heredar a sus hijos y a sus nietos?

Un bonito ejercicio para realizar en familia, consiste en que cada miembro haga un listado de los valores que considere más importantes y los comparta con los demás. Luego de escuchar a todos, se extraen aquellos valores que se repiten más en los listados y que reflejen la personalidad y el estilo único de la familia. Estos valores se pueden transcribir y colocar en un portarretratos o en un cuadro, en un lugar visible de la casa, para que todos recuerden el compromiso de vivirlos día a día. Los niños podrían colaborar representando los valores elegidos a través de un dibujo, que también se puede exhibir.

¿Queremos vivir en un país diferente, en un mundo distinto? El cambio comienza en cada uno de nosotros y en nuestras familias. Comprometámonos a ser una FAMILIA CON VALORES.

La Paradoja de Nuestro Tiempo -  por George Carlin
Tenemos Edificios más altos y temperamentos más cortos; carreteras más amplias, pero puntos de vista más angostos. Gastamos más pero tenemos menos; compramos más, pero lo disfrutamos menos.
Tenemos casas más grandes y familias más pequeñas; más conveniencias y menos tiempo; tenemos más estudio, pero menos sensibilidad; más títulos y menos sentido común; más medicina, pero menos salud.
Hemos multiplicado nuestras posesiones, pero hemos reducido nuestros valores humanos.
Hemos ido a la luna y regresado pero tenemos problemas para cruzar la calle para conocer al vecino. Hemos conquistado el espacio sideral, pero no el espacio interno.
Escribimos más, pero aprendemos menos. Hacemos más planes, pero perseveramos menos.
Aprendimos a vivir aprisa, pero no a ser pacientes. Creamos más computadoras para retener más información para producir más copias que antes, pero tenemos menos comunicación. Este es el tiempo de comidas rápidas y digestiones lentas.
Hombres altos y personalidades pequeñas; ganancias altas, y relaciones vacías.

Es el tiempo de Paz mundial, pero de guerra domestica; mas diversiones, pero menos diversión; más variedad de comida, pero menos valor nutritivo. Estos son los días de dos sueldos por familia, pero más divorcios; de casas más lujosas, pero hogares quebrados. Es un tiempo cuando hay mucho en el aparador y nada el almacén. Es el tiempo en que agregamos años a la vida, pero no vida a nuestros años.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

    Acuerdo entre Chevron y Junior Achievement Guatemala beneficia a jóvenes con becas universitarias   Chevron líder en la industria ...